La bandera ondeando por el fuerte viento de los nuevos aires, arrastrando el humo de lo que solo fueron números. Las ruinas no son más que historia al fin y al cabo, recuérdalo. Parte de la historia escrita y otras tantas por conocer, escribo también como parte de la historia de quienes forman parte de la mía. Que el horizonte no sea más que el límite de lo conocido y el comienzo del conocer. Nacido para ganar, volando a cien mil millas de lo típico, apuntando a las estrellas con la luna por insignia y la noche por bandera; conquistando otros planetas. Que tocar techo no sea temor sino necesidad y que el miedo a perderse, no sea más, que la excusa para no querer encontrarse,de nuevo
Un soplo de aire fresco se aproxima por el horizonte, meses después del vendaval. Las cartas sobre la mesa del nuevo tablero de juego. En busca de una nueva religión, de algo o de alguien en quien creer, que nos haga sentir que la primavera solo se va de quienes la olvidan, y que las flores solo se marchitan de aquellos, que no las sienten vivas, después de todo. Por fin me encontré y pude ordenar este desorden, buscando la supuesta lámpara de los deseos entre los cacharros del trastero. La luz al final del túnel era mentira , estaba al otro lado del espejo; pobre de mí. ¡Cuánto tiempo sin vernos! SSMM: Me enseñasteis que, las conversaciones de terraza en primera línea de playa no siempre son banales, y que las lágrimas esta vez, sí, colmaron el vaso medio lleno:cuestión de autoestima, gracias. (Ex)Adicto a no apostar por el local, ahora siempre juego en casa. Que se preparen.